Infojus: Citan a indagatoria al ex espía Raúl Martins por trata de personas

El ex miembro de la Secretaría de Inteligencia del Estado (SIDE) tendrá que dar explicaciones frente a la jueza María Servini de Cubría sobre su relación con un prostíbulo conocido como “Top Secret”. “Ese local estuvo a nombre de mi papá”, dijo la hija, que ya lo denunció en 2011.

Una hija que denuncia a su padre. Un proxeneta exiliado en México. Fotos y vídeos que llegan a involucrar al jefe de Gobierno porteño. La causa que investiga al ex miembro de la Secretaría de Inteligencia del Estado (SIDE) Raúl Martins por trata de personas con fines de explotación sexual tiene todos los componentes de una novela policial. Aunque los capítulos de la saga no tienen nada de ficción. Desde fines de 2011, cuando explotó el escándalo por la denuncia pública de Lorena Martins, el caso atravesó distintos vaivenes judiciales que han ralentizado la investigación. Ayer, el fiscal Federico Delgado pidió la indagatoria del ex agente de inteligencia.

“Estoy contenta con la noticia pero lo llaman a indagatoria por uno solo de los ocho prostíbulos. Hay que hacer una investigación más completa que todavía no se hizo”, dijo Lorena Martins a Infojus Noticias desde España.

Su padre tendrá que dar explicaciones frente a la jueza María Servini de Cubría sobre su relación con el local ubicado en Avenida Juan B. Justo 5302 conocido como “Top Secret”. El lugar tuvo otros nombres pero siempre se lo identificó con un mismo logotipo: una manzana mordida. El año pasado circuló en la web un vídeo de 1993 donde aparece el propio Raúl Martins, como si fuera un Hugh Hefner local, en “Top Secret” sorteando “pases” con mujeres. “Esta es una nueva adquisición de la casa”, dice el hombre denunciado en las imágenes exhibiendo a la “sorteada” a su lado.

Delgado argumentó su pedido de indagatoria en que a pesar de que el local del barrio porteño Villa Santa Rita tuvo distintas denominaciones y “gerenciadores” a lo largo de los años, “nunca ha cambiado su objeto comercial”. Para el fiscal la finalidad de este lugar era “la explotación sexual de mujeres bajo la fachada de bar/café/whiskería”. Según el representante del Ministerio Público Fiscal, en el informe de dominio de “Top secret” aparece el nombre de la madre de Martins, Presilla Coggiola Cledi.

“Ese local estuvo a nombre de mi papá en un principio. Si uno pide el historial al Gobierno de la Ciudad tiene que aparecer. En un comienzo se ve que no tenía tanta experiencia para operar en las sombras y ponía su nombre”, explicó la hija del ex espía.

El fiscal se basó, también, en el informe presentado por las profesionales del Programa Nacional de Rescate y Acompañamiento a las Personas Damnificadas por el Delito de Trata, dependiente del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de nación. En las entrevistas a las víctimas que se rescataron en el lugar, el equipo comandado por Zaida Gatti se encontró con  ”discursos monocordes preparados por los regentes del lugar, quienes de seguro las adoctrinaron para que no informen sobre los padecimientos”.

En 2012 el Programa Nacional de Rescate y Acompañamiento a las Personas Damnificadas por el Delito de Trata hizo 32 allanamientos en el marco de la investigación judicial que investiga a Martins por trata de personas.

En el oficio de ayer, Delgado también solicitó la indagatoria para otros dos implicados: Leandro Daniel Taboada y  Mario Oscar Ozán. La jueza tendrá que resolver si hace lugar al pedido del fiscal.

Una red con vínculos internacionales

La red de trata denunciada por la hija de Martins involucraba, de mínima, a 8 locales que funcionaban en el ámbito de la Ciudad de Buenos Aires. Pero también se expandía a México. En Cancún el ex agente de inteligencia tiene su base de operaciones. Según denunció Lorena Martins a algunas de las mujeres les pagaban el pasaje a México prometiéndoles trabajos como modelos o recepcionistas. Cuando llegaban les quitaban el pasaporte y las endeudaban para obligarlas a ejercer la prostitución.

En 2012 circuló una imagen del actual jefe de gobierno porteño, Mauricio Macri, visitando junto a su esposa Juliana Awada el local nocturno mexicano “Mix Sky Lounge”, de Cancún, que es propiedad de Martins.

Los vínculos con Macri iban más allá de esa postal. La hija del hombre sospechado de proxeneta  aportó documentación y pruebas originales que vinculaban a policías federales y a funcionarios del Gobierno porteño con la organización.

Hacia finales de 2012 la Cámara Federal desestimó las presentaciones judiciales que había hecho Lorena Martins. Los jueces argumentaron que una hija tiene prohibido denunciar a su padre. La mujer está convencida que existe un “vacío judicial”, porque ella en su denuncia no solo va contra su propio padre sino que nombra a otros integrantes de la red que no son sus familiares.

En septiembre del año pasado, el fiscal Delgado había solicitado reabrir la investigación. Para él subsistía “un grupo de hechos en la nebulosa en virtud de que el archivo decretado no quedó firme, ni fue resuelto”.

“El fiscal lucha contra una jueza que no quiere investigar”, dijo Lorena Martins a Infojus Noticias haciendo referencia a María Servini de Cubría, quien en 2012 ordenó el archivo de la causa.

De espía a proxeneta

No solo el presente de Martins es oscuro. También tiene un pasado vinculado a las sombras. En 1973 ingresó a la SIDE recomendado por un teniente coronel amigo de su familia. Y allí prestó servicios bajo el nombre deAristóbulo Manghi. Sus tareas como agente secreto implicaban tomar fotografías de militantes en actos y marchas. Según su hija, en esos años Martins se hizo amigo del jefe de la Triple A, Aníbal Gordon. Su tarea pasó de sacar fotos  a marcar las personas que luego los grupos de tareas iban a secuestrar y  desaparecer.

Entre 1978 y 1979 Martins abrió su primer prostíbulo, con los años tendría siete más solo en capital. En 1987 dejó la vida de espía y se convirtió, según las denuncias de su hija, en un proxeneta full time.

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