Infojus: Marcha de la Gorra: cinco ciudades contra la violencia institucional

A pocos días de que se identificó el cuerpo de Luciano Arruga, familiares de víctimas y organizaciones políticas y de derechos humanos, participan de un marcha nacional para denunciar casos de abuso policial y gatillo fácil.

A menos de una semana que se identificó el cuerpo de Luciana Arruga, que estaba desaparecido desde 2009, después de que lo detuvieron en un destacamento policial de Lomas del Mirador, organizaciones sociales y políticas partieron esta mañana desde el Departamento Central de la Policía Federal, en Belgrano y Cevallos, hacia la sede de la Policía Bonaerense, en La Plata. Se trata de la primera edición nacional de la “Marcha de la Gorra” para denunciar los casos de violencia institucional hacia los jóvenes pobres, y fue convocada bajo la consiga “Ni un joven menos” y “No somos peligrosos. Estamos en peligro”.En simultáneo, habrá actos en Buenos Aires, La Plata, Córdoba, Mendoza y Rosario.

En un comunicado, la Unión de Trabajadores de la Educación (UTE), uno de los convocantes a la movilización, que desde hace ochos años se realiza  en Córdoba,  denunció que “los jóvenes pobres padecen permanentemente el hostigamiento por parte de las fuerzas de seguridad”. “No hay registro de la cantidad de casos de abuso policial. Los pocos que pudo constatar el Registro Nacional de Casos de Tortura y/o Malos Tratos son 73 (entre diciembre de 2010 y septiembre de 2013)”, puntualiza el documento, y consigna que “en 62 de los hechos, las víctimas lograron individualizar a 278 victimarios ejerciendo violencia física, lo que da un promedio de más de 4 agentes por hecho”. Y agregó que: “El marco de emergencia en la provincia de Buenos Aires agravó esta situación: en agosto difundieron cifras oficiales que hablaban de 394 ‘enfrentamientos’ policiales en los que se registraron 137 ‘delincuentes’ heridos y 85 muertos. No fueron inocentes hasta que se demostrara lo contrario, y nadie investiga estas situaciones. Los operadores judiciales suelen convalidar las versiones policiales, que ocultan sus abusos con el pretexto de ‘legítima defensa’. Hay pena de muerte para nuestros pibes. Hay impunidad para los culpables”.

“Luciano Arruga era hostigado por la policía de su barrio, su hermana escuchó sus gritos bajo tortura en el Destacamento de Lomas del Mirador y ocultaron su cuerpo durante 5 años y ocho meses. Es la gota que rebalsa el vaso. Luciano es símbolo de una problemática social persistente, que debe ser sancionada”, sostuvieron los organizadores.

El primer día de febrero de 2009 un auto atropelló a Luciano en la vía rápida de la General Paz, frente a una garita de la policía y fue enterrado como NN en el cementerio de la Chacarita fue identificado como Luciano Arruga. La ficha de la autopsia, tres fotos y la información de las huellas digitales del cadáver registrado como NN de Luciano Arruga estuvieron cuatro años perdidos en la marea de fojas y expedientes que investigaba su desaparición en La Matanza. Ningún operador judicial prestó atención a esos datos que habían sido pedidos al Cuerpo Médico Forense del Poder Judicial de la Nación.

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