Infojus: Una bailarina del Teatro Colón le ganó un juicio al gobierno porteño

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Una bailarina del Teatro Colón le ganó un juicio al gobierno porteño

| Fuente: Infojus Noticias | Fecha de publicación: 2013-11-21 | Por: Néstor Espósito | Fecha de captura:: 2016-02-01 12:43

Un juez en lo contencioso administrativo de la ciudad de Buenos Aires habló de “situación kafkiana” y le concedió a la bailarina Miriam Coelho el reconocimiento como “primera bailarina”, que desempeña desde largo tiempo atrás y que las autoridades del teatro le negaban. Hacía veinte años que la mujer reclamaba el cambio de cargo en el escalafón.

La Justicia en lo Contencioso Administrativo y Tributario de la Capital Federal puso las cosas en su lugar. Después de más de dos décadas de injustas postergaciones, le concedió a la notable bailarina del teatro Colón Miriam Coelho el reconocimiento a la función de “primera bailarina” que desempeña desde largo tiempo atrás. Dueña de un currículum impresionante, Coelho tenía categoría (y salario) de “bailarina de fila” desde 1992, pese a que sus virtudes eran permanentemente destacadas por artistas de la talla de Julio Bocca, Maximiliano Guerra y Eleonora Cassano.

En los hechos, era “primera bailarina”, pero cobraba mucho menos de lo que le correspondía. Y cuando reclamaba, quedaba sometida a una situación absurda. El juez Guillermo Scheibler la describió así: “Resulta poco más que kafkiana la situación en que se coloca a la actora. Si solicita que se reconozca su carácter de ‘primera bailarina’, se le contesta que ello sólo sería factible mediante el procedimiento de concurso. Ahora bien, si luego de ello solicita entonces que se convoquen y sustancien los respectivos concursos, la respuesta es sólo silencio e inactividad. La misma inacción que desde hace dos décadas frustra las legítimas aspiraciones y derechos de quienes contribuyen con su esfuerzo y dedicación al prestigio del Teatro Colón”.

El juez Scheibler hizo lugar a la demanda y resolvió “ordenar al Ente Autárquico del Teatro Colón (EATC) que reconozca a la actora la categoría/escalafón de ‘Primera Bailarina’ y adecue a tal fin su situación de revista y las tareas que se le asignen”. También admitió “el reclamo salarial de la actora” y en consecuencia dispuso “condenar al EATC a abonarle las sumas que resulten de la diferencia de haberes correspondiente al cargo ‘Bailarina de Fila’ y ‘Primera Bailarina’“  desde el año 2000 hasta  la fecha.

El repaso de la historia artística de Coelho, reflejado en el expediente, impresiona. Estudió Danza en el Instituto Superior de Arte del Teatro Colón, acompañó a Bocca y Cassano en varias obras, participó en muchísimas temporadas del Ballet del Teatro Colón. Viajó a un Festival de Madrid junto a Maximiliano Guerra y bailó también con Iñaki Urlezaga.

Pese a ese extenso y prestigioso CV, debió iniciar un juicio ordinario contra el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires “con el objeto de obtener el cambio de categoría por entender que su empleadora la mantiene en un rango inferior que no condice con los antecedentes y roles desempeñados durante el transcurso de su carrera profesional”. 

En ese expediente -al que tuvo acceso Infojus Noticias-** “comenta que luego de ingresar mediante concurso público como bailarina de fila del teatro “con galardones y becas obtenidas en competencias internacionales” fue seleccionada por coreógrafos nacionales y extranjeros y elegida por Julio Bocca, Maximiliano Guerra e Iñaqui Urlezeaga como partenaire, en presentaciones en Argentina y en el exterior”.

“El cargo otorgado no se condice con su prestigio tanto local como internacional; que en segundo término vulnera el desarrollo de su carrera administrativa impidiéndole el acceso a los niveles jerárquicos de conducción en forma estable; que en tercer término afecta a su patrimonio”. El juez sostuvo que “las remuneraciones liquidadas como bailarina de fila son muy inferiores a las que le correspondería percibir en relación al cargo desempeñado como primera bailarina”. Y agregó que Coelho se encuentra “cautiva dentro de una inmovilidad del cargo con motivo de la omisión incurrida por parte de la administración en cuanto al dictado del acto administrativo correspondiente o al llamado en tiempo oportuno al concurso regulado por la ley 471”. Para el otorgamiento de un rol protagónico participan en la selección el director de la compañía, sus maestros internos y el coreógrafo autor o repositor de la obra, y que en cada oportunidad se hace un juicio de mérito de sus habilidades técnicas y artísticas para concederle dichos roles.

“De los elementos acompañados a la causa se desprende la idoneidad y reconocimiento profesional de Coelho. La omisión en regularizar la situación escalafonaria del Cuerpo de Ballet del EATC mediante los procedimientos previstos en las normas que lo regulan afecta de modo concreto el derecho a la carrera de la actora. La ausencia de concursos por décadas torna a este derecho a la carrera en una fórmula vacua e ilusoria”, sostiene la sentencia.

“Luego de más de veinte años de no convocar a concursos para cubrir los cargos del Ballet Estable, una decisión que difiriese la pretensión de la actora a esa instancia procedimental (de incierta materialización a la luz de las conductas/omisiones cristalizadas en la materia por la demandada en las últimas décadas), difícilmente pueda evitar ser calificada como una burla o parodia del enérgico control de legalidad que deben realizar los órganos judiciales en resguardo de los derechos constitucionales de los ciudadanos y ciudadanas de Buenos Aires”, concluyó el juez.


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